Y el Señor le respondió: – Voy a darte pruebas de mi bondad, y te daré a conocer mi nombre. Y verás que tengo clemencia de quien quiero tenerla, y soy compasivo con quien quiero serlo. Éxodo 33:19
La bondad de Dios es para todos, Él es un Dios compasivo y amoroso. Entonces ¿Por qué dice en este pasaje que Él es compasivo con quien quiere serlo?
En este pasaje Moisés está hablando cara a cara con Dios y le está pidiendo que acompañe a todo el pueblo en su caminar a la tierra prometida, pues Dios había dicho que iría con Moisés por causa de la terquedad del pueblo.
CONTAMOS CON SU FAVOR
Como los israelitas recién habían hecho el becerro de oro mientras Moisés estaba aún en la montaña con Dios y habían dado otras muestras de su terquedad , no sabían con exactitud como adorar y servir a Dios, pero Él, que es un Dios compasivo, no quería destruirlos, por eso no quería acompañarlos por el desierto.
Pero Moisés insiste en que Dios vaya con todo el pueblo, – O vas con todos nosotros – replicó Moisés – , o mejor no nos hagas salir de aquí. Éxodo 33:15. Moisés sabía que la compañía de Dios era la manera de demostrarle al pueblo que contaban con su favor.
Dios acepta lo que Moisés le pide y le dice que cuenta con su favor y además lo considera su amigo y entonces acompaña al pueblo en su travesía por el desierto.
Por eso dice Dios que Él tiene compasión de quien quiere, pero es necesario buscar esa compasión, Dios está accesible para nosotros también si lo buscamos de todo corazón.
Moisés además le pide a Dios poder verlo con todo su esplendor, él anhelaba ver su rostro, Dios le concede a Moisés lo que pide pero con ciertas limitantes, así que solo pudo ver su espalda después de que pasó por la hendidura donde lo colocó.
MINISTERIO DE AMOR
La compasión de Dios también la podemos encontrar en los evangelios, con el ministerio de Jesús, desde su nacimiento, hasta su muerte y resurrección, todo nos habla de el amor y la compasión de Dios con la humanidad. Y aun después de que Jesús ascendiera al cielo, nos envió al Espíritu Santo, para quedarse con nosotros.
A pesar de nuestra necedad y nuestro pecado, podemos decir que Él ha sido clemente y compasivo con nosotros. Él así lo decidió y hoy, por medio del sacrificio de Cristo, nosotros gozamos de su favor y podemos acercarnos hasta su trono para contemplar su hermosura.
HIJOS MÁS QUE AMIGOS
Moisés en ese tiempo era el único que podía estar delante de Dios y oír su voz, contaba con su favor y fue llamado amigo de Dios, otras traducciones dicen “te he conocido por tu nombre” Éxodo 33:17. Hoy podemos acercarnos a Dios y ser llamados hijos, demos estar felices y agradecidos, pero sobre todo dar gloria a Dios por eso.
Él va siempre delante de nosotros para guiarnos, pues somos su pueblo, por esa razón, es necesario, lo mismo que en aquellos años, estar puros delante de su presencia, para ofrecer nuestra alabanza.
Pensemos siempre en cuán compasivo ha sido dios con nosotros y que a pesar de todo, Él no se cansa de nosotros, sino al contrario, renueva sus bondades cada mañana. El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su amor! Lamentaciones 3:22-23.
Escrito por Iglesias Creativas.